Como mujeres de Mary Ward, nos proponemos promover la Justicia, la Paz y la Integridad de la Creación (JPIC ) de una manera específica de Mary Ward, con un espíritu de libertad, justicia, sinceridad y alegría, que son los que más hablan de los temas de JPIC.
La atención a la JPIC ha sido una parte integral de nuestra misión durante muchos años y la llamada que se nos hace ahora es la de estar más atentos y responder a las cuestiones de JPIC en todo lo que hacemos. Hay muchos miembros de la Familia Mary Ward que trabajan en instituciones educativas, ecología integral, no violencia, tráfico de personas, minería, diálogo interreligioso, atención pastoral y ministerios sociales donde se promueve la JPIC.
En enero de 2020, se creó la Oficina de JPIC de Mary Ward en Roma, con personal de Pauline Macharia IBVM y Adina Balan CJ, con el objetivo de reunir e integrar los esfuerzos colectivos del Instituto en el ministerio de JPIC. Esta es otra iniciativa en la que el IBVM y el CJ colaboran.
Una prioridad actual para nuestro ministerio de JPIC es la ecología integral, tal y como se ilustra en la encíclica Laudato Si del Papa Francisco.
Formamos parte de un movimiento católico global para el cuidado de la creación vivido en nuestro plan de 7 años según la Plataforma de Acción Laudato Si.
Lea la reflexión del IBVM sobre Laudato Si aquí.
Postura corporativa del IBVM sobre la trata de personas
Como miembros del Instituto de la Bienaventurada Virgen María, una congregación internacional y multicultural de religiosas, nos comprometemos a trabajar por la erradicación de todas las formas de trata de personas y sus causas, especialmente entre las mujeres y los niños, dondequiera que vivamos y ejerzamos nuestro ministerio.
Declaración del IBVM sobre la trata de personas, adoptada en la CG 2014, Loyola, España
La trata de seres humanos es una forma moderna de esclavitud que hiere a mujeres, hombres y niños de todo el mundo al reclutarlos, albergarlos o transportarlos por la fuerza, el fraude o la coacción. Es el segundo delito más importante del mundo y genera miles de millones de dólares para los traficantes, al tiempo que victimiza a millones de personas, algunas de ellas de tan solo cuatro años de edad. Se calcula que 20,9 millones de mujeres, hombres y niños de todo el mundo son víctimas de los traficantes internacionales. Esta cifra refleja a los que están dentro de nuestras fronteras y a los que cruzan las fronteras internacionales. Las víctimas pueden encontrarse en la servidumbre doméstica, la industria del sexo comercial, los servicios de hostelería, los talleres clandestinos, la construcción, la agricultura, las novias por correo, los niños soldados, la mendicidad, así como la extracción de órganos y las adopciones ilegales. Este delito seguirá existiendo mientras la demanda sea alta y económicamente rentable para los traficantes.
La trata de personas existe en todos los lugares donde viven y ejercen su ministerio los miembros, asociados y colaboradores del IBVM. Los miembros del IBVM trabajan con otros en la educación, la defensa, la prevención, la oración y otras formas de abordar el problema de la trata de personas. Sumamos nuestra voz y nuestras acciones a las de muchas otras congregaciones religiosas y ONG de la sociedad civil.